sábado, 29 de septiembre de 2012
Impresionante el tiempo, la velocidad de nuestras vidas. Me refiero a que rápido cambiamos de idea y a la facilidad con la que nos pegamos a personas, manías, sentimientos, etc. Hoy amamos mañana odiamos, pasado no arrepentimos y a veces llegamos a un punto de arrepentimiento, en el que pedimos que todo vuelva a ser como era antes. En fin, nos damos cuenta de que somos bastante efímeros y superficiales, pero, en ese momento es cuando queremos cambios, en general son buenos, pero me he dado cuenta que en este momento es cuando la gente se equivoca demasiado y acaba fastidiándose. El secreto de los cambios está en que tienen que ser lentos, tenemos que estar atentos, a veces tenemos que ser hasta un poco “detallista”, porque al fin y al cabo, la dirección es mucho más importante que la velocidad. Ya decía Lucio Séneca “Cuando no sabes a donde ir, ningún viento es favorable”.
jueves, 27 de septiembre de 2012
miércoles, 26 de septiembre de 2012
"Si tienes piso en propiedad, trabajo estable bien remunerado y una preparación ajustada a tu realidad, es muy probable que no seas joven. Si no sabes lo que es enlazar contratos basura con masters que no ofrecen más salidas que las chicas de la última fila, es muy problable que no seas joven. Y si cuando pones la tele no te encuentras a los que se supone que tienen tu edad, siendo tratados como causantes de todo mal, desde los actos vandálicos al botellón, el ruido, la polución, los graffittis, la anorexia, los okupas, la aintiglobalización o la telebasura, es muy probable que no seas, ni remotamente joven. ¿No le parece incrible que después de todo esto, haya gente joven que aún se empeñe en enamorarse, trabajar, tener hijos, una vida normal e intentar, simplemente, salir adelante?"
Lo cierto es que no me gusta que la gente me conozca al cien por cien, por eso me gusta ponerlo complicado. No soy demasiado tímida, pero sí me gusta ser reservada. En ocasiones lo soy demasiado quizás. Creo que solo deberían tener el privilegio de conocernos aquellas personas que dicen que se cuentan con los dedos de una mano, o como mínimo, aquellos que tienen un mínimo interés en hacerlo y no lo hacen solo por casualidad. Por mi parte, creo que todas las personas deberíamos tener guardado lo mejor de nosotros para aquellos que de verdad merecen disfrutarlo.
Mientras disfruto de la brisa marina, del viento y del sonido de las olas romper y llegar a la orilla, recuerdo que afortunadamente no soy la única que aprecia y disfruta de esa joya de la naturaleza aun cuando hace frío. Caminar, sumergir los pies por este desierto y sentir el tacto húmedo. Parecer dueña o dueño de un lugar desolado cuando el cielo es gris, y al que te vienen a estorbar y molestar todos esos domingueros cuando un sol de justicia los anima a sacar a pasear sus panzas con una cerveza en la mano. A cobijarse más tarde bajo una sombrilla mientras conversan y observan a las muchachas pasar. A la playa hay que venir en días como el de hoy, por la noche, o cuando ya no hace calor. A pensar, a intentar alcanzar ver más allá del horizonte mientras numerosos pensamientos rondan, se asientan y maduran en tu cabeza. Hay que venir solo, preferiblemente.
domingo, 23 de septiembre de 2012
Una vez le preguntaron a Lewis Hine, un fotógrafo de guerra que por´que había elegido es profesión, el contestó que si pudiese contar con palabras todo lo que veía, no necesitaría cargar todo el día con una cámara de fotos... Que ciertos momentos de belleza, de desolación, de horror y de heroísmo estaban más allá de las palabras. Yo también lo creo , hay cosas que no podemos explicar con simples palabras, cosas como seguir vivos sentimientos como el amor y el compromiso o sensaciones como volver a abrazar a un amigo. Quizá por eso nuestra vida se compone de imágenes, momentos congelados en el tiempo para siempre, de decisiones que cambian sin remedio el rumbo de las cosas, de fotografías fijas guardadas en la memoria que nos recuerdan cada segundo lo hermoso que es vivir.
miércoles, 12 de septiembre de 2012
"Oye, puede que no seas algo perfecto, ni alguien perfecto, puede que ni siquiera te acerques a la perfección. Realmente, ¿qué coño es eso? Y… ¿quién coño quiere algo perfecto? Si ya sé que se te olvidará casi siempre darme los buenos días por las mañanas. Sé que nunca vas a decirme exactamente lo que quiero oír. Seguramente tendré que repetirte las cosas cien veces y aún así no las recordarás. Me vas a hacer ponerme nerviosa y gritar. Jamás se te va a ocurrir aparecer en la puerta de mi casa. Y por supuesto que no tienes ni idea de provocar un amanecer. Y qué importa si no entiendo ni la mitad de lo que dices, si cruzarme contigo no es lo mejor que me ha pasado en la vida, pero se acerca"
"Es amor una palabra oscura. Vibra en nuestros corazones como el nombre de un país lejano en el que, desde la infancia, hemos oído ensalzar cielos y mármoles. Expresa aquello que libera, aquello que hace sufrir, ovillada sobre sí misma, reluciente y hueca, como las conchas que nos llevamos al oído para advertir en ellas lo infinito"
martes, 11 de septiembre de 2012
La autodestrucción más dulce, mi sonrisa preferida
"Y no quiero tus mejores noches si no me das tu buenos días. Podría hacerte el amor y la guerra, entra otras cosas, en el mismo espacio y tiempo. Pero aquí solo estoy perdiendo horas, minutos y segundos. Tengo demasiados daños colaterales por batallas perdidas, pero aún hay quien dice que la guerra aún no está perdida"
"El mundo se ha vuelto loco, es lo único fantástico, ser de carne y hueso en una sociedad de plástico; Mientras la vida te consume, quieren venderte la felicidad metida en un perfume, en un coche, en la ropa. No eres mas que tu apariencia, puedes engañarme a mí, pero no a tu consciencia."
"Isusko & Sbrv- Marionetas"
sábado, 8 de septiembre de 2012
(...)Hay algunas cosas que no cambian por mucho que lo desees. Pero, ¿qué hay de lo que sí podemos cambiar? Ahí es donde hay que dejarse la piel"
Cambiar es la constante en la vida de mucha gente. Sin embargo, por mucho que nos empeñemos, algunas cosas nunca cambian y nos persiguen de por vida. Hay cosas que es mejor asumir y aprender a vivir con ellas para poder prestar atención a aquellas cosas que si pueden cambiarse. "Curar un músculo que lleva tiempo dañado cuesta más que curar una contractura reciente. Lo mismo pasa con las personas. Cambiar algo que forma parte de nuestra vida desde hace mucho, duele. Entonces, a pesar de ese dolor, ¿por qué nos empeñamos tanto en cambiar? Muchas veces son las personas que nos quieren las que nos recuerdan lo que realmente queremos ser y nos empujan al cambio. Otras veces elegimos cambiar porque tenemos miedo a estar equivocados y perpetuarnos en el error o porque sabemos que cambiar es la única manera que existe para dejar de sufrir. Yo antes era diferente. Supongo que más feliz. Sin duda era más joven, más optimista y, sobre todo, menos resentido, pero es que antes no me habían pasado algunas cosas. Es el tiempo el que me ha cambiado. Nadie me preguntó jamás si yo quería cambiar, si quería ser lo que soy. La vida decidió por mí. La pregunta es: ¿puedo cambiar yo mi vida? Quiero cambiar, sí. Desearía retrasar mi reloj y regresar a ser el que era hace diez años. Pero si algo he aprendido gracias al tiempo es que la mayoría de las veces no es suficiente dejarnos la piel en el intento porque muchas cosas no cambiarán. Por mucho que lo deseemos... Cambiar está sobrevalorado. Lo que de verdad tiene mérito es asumir que eres como eres y soportarte todos los días. Asumir que tu vida es la que es e intentar hacerlo lo mejor posible porque hay algunas cosas que no cambian por mucho que lo desees. Pero, ¿qué hay de lo que sí podemos cambiar? Ahí es donde hay que dejarse la piel."
"Si notamos que nuestro corazón se acelera habremos encontrado un nuevo motivo para vivir"
Todos tenemos claro lo que queremos. Sin embargo, hay veces que nos resulta muy difícil afrontar la verdad. Afortunadamente, la inteligencia emocional existe y el corazón está ahí para avisarnos de nuestros errores y empujarnos a hacer aquello que nos hace felices. "Nos pasamos la vida dándole vueltas a la cabeza. No paramos de buscar razones inteligentes para hacer lo que queremos y también para justificar por qué no lo hacemos. Y en esta búsqueda, entre razón y razón, olvidamos que lo que perseguimos siempre ha estado ahí, al alcance de nuestra mano. Basta con seguir el ritmo que marca el latido de nuestro corazón. Nuestro corazón nos alienta, nos enseña a darlo todo a renunciar a todo por las personas que queremos. El corazón se empeña en mantenernos siempre vivos. Si notamos que se acelera es que vamos por el buen camino. El corazón nos mantiene vivos y nos empeñamos en sacar fuerza de flaqueza y asumimos que sin riesgo no hay gloria. Tomar decisiones difíciles, elegir alejarnos cuando queríamos estar cerca, liberar de sus ataduras a los que queremos… tan sólo se puede hacer siguiendo los dictados del corazón. Si notamos que nuestro corazón se acelera habremos encontrado un nuevo motivo para vivir y, entonces, la vida te cambia."
Cargar con tu desición y sus consecuencias
Arrepentimiento. Ese sentimiento que en algún momento todos hemos tenido. Esa rabia por haber decidido mal. Esa impotencia por no poder cambiar las cosas. Notar que ya es tarde, que lo que digas ahora ya no importa. Sentir como os alejáis, poco a poco, lentamente, como mas duele.
Cargar con tu decisión sobre la espalda, bueno, con ella y con sus consecuencias. Quitarte el peso de encima con lágrimas que no van a curar nada. Odiarte por hacer caso a la razón y no al corazón. Notar como mueren los planes que ni si quiera habían nacido. Besos marchitos en tus labios esperan que vuelva, pero no lo hará, ha pasado mucho tiempo ya.
Un viaje en el tiempo, solo uno, y poder callar tú razón y la suya con un beso, y cambiar toda vuestra historia.. Todo lo que un beso podría haber cambiado, es todo lo que ahora echas de menos
Cargar con tu decisión sobre la espalda, bueno, con ella y con sus consecuencias. Quitarte el peso de encima con lágrimas que no van a curar nada. Odiarte por hacer caso a la razón y no al corazón. Notar como mueren los planes que ni si quiera habían nacido. Besos marchitos en tus labios esperan que vuelva, pero no lo hará, ha pasado mucho tiempo ya.
Un viaje en el tiempo, solo uno, y poder callar tú razón y la suya con un beso, y cambiar toda vuestra historia.. Todo lo que un beso podría haber cambiado, es todo lo que ahora echas de menos
jueves, 6 de septiembre de 2012
Todo lo que han cambiado las cosas, y todo por ti. La verdad que nunca creí un final así, vamos ni se me pasó por la cabeza porque no quería, y además confiaba en ti en esa situación. Ahora, que todo acabó, miro la circunstancias y me da pena. Llego a saber esto y puede que me lo piense, porque lo mejor que pasó entre nosotros fue la amistad, y se ha perdido y no sabes lo mucho que te echo de menos
miércoles, 5 de septiembre de 2012
"Tengo un cumplido estupendo para ti: puede que yo sea la única persona sobre la faz de la Tierra que sepa que eres la mujer mas fantástica de la tierra. Puede que yo sea el único que aprecia lo asombrosa que eres en cada una de las cosas que haces, y en cada uno de los pensamientos que tienes, y en como dices lo que quieres decir y en como, casi siempre, quieres decir algo que tiene que ver con ser sincero y bueno. Y creo que la mayoría de la gente se pierde eso de ti, y yo les observo preguntándome como pueden verte traer su comida y limpiar sus mesas y no captar que acaban de conocer a la mujer más maravillosa que existe, y el hecho de que yo si lo capte me hace sentir bien, conmigo mismo."
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
J.D. Salinger
Tiene gracia. No cuenten nunca nada a nadie. En el momento en que uno cuenta cualquier cosa, empieza a echar de menos a todo el mundo